lunes, 28 de noviembre de 2016

NAVEGANDO AL COMPÁS DE SU VERGA


Buen día muchachada.
El día de hoy les traigo relato nuevo. Primero que nada una disculpa si no he subido. Pero es que el trabajo no me lo permite.
Pero bueno, al grano.

Algun@ de ustedes alguna vez ha tenido relaciones, faje, cachondeo o lo que sea que involucre acción cuerpo a cuerpo con otro hombre pero en un internet?
Pues yo sí.
Todos recordarán el internet que se ubicaba en la calle segunda entre la constitución y revolución de nuestra Tijuana Gay. Pues ahí no sucedieron los hechos (cabe destacar que viví una que otra experiencia en dicho internet, y cuando lo cerraron pensé que no habría lugar similar en la ciudad). Los hechos sucedieron en otro internet de un lugar más o menos transitado de la ciudad.
La vez que entré sentías la pestilencia golpear tu nariz, una mezcla entre sexo, sudor y pecado. Si bien son de esas experiencias las que más excitan a los acuarianos (soy acuario y según buscamos experiencias fuertes, nuevas, que reten nuestra capacidad). Me acerqué a la caja, con mucho nervio al decir verdad. Sin embargo, vi la mirada entre las dos personas que estaban en la caja, detecté que ellos sabían a lo que yo iba.

Me dijeron que rentaba la máquina por media hora o más. Accedí a rentarla por una hora, total no era mucho el costo. Al entrar no pude ver muchas personas instaladas. Fue mucha mi decepción, sin embargo, le di el beneficio de la duda al lugar. Puse mi mochila en el piso, acto del cual me arrepentí puesto luego descubrí los jugos de hombre derramados en el suelo.

Me cambié de lugar tras lo ocurrido. Busqué otra computadora, a alguna no le servía el teclado, otra no tenía mouse o de plano no prendía. Encontré una en medias condiciones que me permitieran ver algo de porno. Tras esto entró al lugar un hombre ya de más de 35, mega ejercitado, lo cual noté por la camisa que llevaba que bien podría ser de un adolescente. Súper entallada al cuerpo. Anillo de bodas en el dedo correspondiente. Barba, ligeras canas en su cabeza y barba. Unos brazos de acero. Un hombre en toda la extensión de la palabra. Después de entrar se sentó al frente de mí. Lo cual me permitió ver que bajo su cierre apenas se sentó y empezó a masturbarse. Yo no esperaba que el me notara, y no lo hizo. En primer momento.

Él continuó con su arduo trabajo manual sobre su miembro, posteriormente noté que se escuchaba  el ruido de un cinturón al desabrocharse. Lo cual aumentó mi curiosisdad y me levanté de mi lugar brevemente. El me vio e hizo la mirada sugerente como si dijera “vas a querer o se lo tiro al perro?”. Me atraganté sólo de verle un pene que se inclinaba hacia arriba como si fuera un gancho.

Decidí acercarme de manera cautelosa, dejar que mi mano guiara mis más profundos deseos, hasta llegar a su pene. Un fierro que mi mano tenía dificultad para agarrarlo. Puesto era grande. Mucho, cabeza grande, rosada, que al pesarle en dedo dejaba salir líquido pre-seminal puesto que deseaba recibir una mamada. Me atreví a hacerlo.

Pocos minutos después noté que había miradas curiosas que nos observaban. Sin embargo, ante mi molestia se alejaron (algunos). Cuando me sentí en confianza le coloqué un condón mismo que se lo puse con la boca para que siguiera sintiendo placer oral. Bajé un poco mis pantalones, al querer abrir mis nalgas para sentarme, sentí una embestida profunda. Una embestida al creer que yo iba a estar en control, siendo totalmente lo contrario, me tomó de la cadera, él sentado empezó a darme estocadas que atravesaban mi cuerpo y mente.

Esa sesión de sexo, rápido, sexo fuerte y totalmente rico hizo que fuera la primera experiencia de tipo exhibicionista en mi vida. Como saben son más del tipo voyeurista. Pero siempre hay una primera vez para todo. Como siempre, cuéntenme, les ha pasado? Dónde?


Esperen otra entrada próximamente. 

lunes, 14 de noviembre de 2016

Domando al chacal

Bueno mi estimada gente, ahora les vengo ofreciendo el siguiente relato:

En 2014, en casa teníamos una tienda en la casa, un abarrotes. Después de todo la familia debe buscar más ingreso. Ya saben el dinero nunca es suficiente.
A través de ese abarrotes pude conocer a "Emilio", el hijo de la vecina que la visitaba desde Guadalajara. El chavo es cuestión era de esos chacales que son fruto del deseo de muchos de nosotros.
No sé ustedes pero ver a un hombre, con un cuerpo de envidia producto del trabajo pesado (construcción, cargadores, o ese tipo de cosas), sumándole que tenía unos tatuajes que a saber de ustedes , me encantan los hombres con tatuajes.

Bueno continuando, el chico iba seguido a la casa a buscar garrafones de agua y era la oportunidad perfecta para observar su musculatura jajaja. En fin, el juego de miradas comenzó. Cada vez iba más seguido a comprar cualquier cosa. Un día, diciembre de ese mismo año, lo miré desde la casa que él estaba en la calle viendo hacia la casa, que afortunadamente estaba sólo ese día. Bueno entonces le hice la típica seña que indica que si quieres una mamada. Al principio me mandó a la verga. Jajaja, seguí insistiendo como dos veces más a la tercera vez me vio y se rió. Asintió con la cabeza y supe que era hora de tenerlo.

Lo metí rápidamente a la casa, ya saben, la discreción jaja. Empecé a acariciarle el pene por encima de su pantalón, sabía que era grande antes de tocarlo, algo dentro de mi lo imaginaba. Por fortuna estaba en lo correcto. Empecé a sentir un pene muy grande, grueso, con una cabeza pronunciable. Un señor pene. Le fui quitando poco a poco los pantalones, traté de besarlo pero ya saben que los chacales no se prestan a eso. Total, sabía que con tenerlo donde lo tenía ya era una gran victoria. Le quité los pantalones y me hinqué, no necesariamente para rezar. Le hice un oral que ni el se lo creía, empujaba su cuerpo contra mi boca, se introducía cada vez más profundo, yo estaba al borde de las lágrimas.  

El siguiente paso fue obviamente coger y se lo propuse, pero estaba un poco renuente. Lo senté para seguirle haciendo oral, y poco a poco me fui quitando la ropa. 

El pantalón y luego el boxer, mientras estaba medio recostado en el sofá con la mirada hacia el techo me fui posicionando poco a poco sobre su pene con mis nalgas abiertas, poco a poco fui dominandole para que se introdujera en mí. Con mucho tacto y cuidado. Sabía que dolería pero eso me emocionaba más aún. De repente sentí una punzada sobre mis entrañas. Él había decidido tomarme de la cadera y empujar todo hacia adentro. Mi grito lo contuve muy a mis adentros, después de todo era todo "discreto". "Emilio" empezó a empujar cada vez más rápido, sabía que lo disfrutaba, en ese momento yo era suyo y él era mío. Me gusta montar, y en ese momento yo tenía el control del acto, de pronto, se paró y eso ocasionó que yo me levantara junto con él. Me puso en contra de la pared para que no pudiera moverme y él ejercer el control. Yo cedí, después de todo iba a disfrutarlo. 


Para no hacer el cuento largo, estuvimos así por un rato.me dio una de las mejores cogidas de mi vida. Obviamente repetimos algunas veces, volveré a contarles sobre "Emilio".


Como siempre, cuenten si les ha pasado, cómo?


-N

domingo, 13 de noviembre de 2016

Cruising en Tijuana

Bueno, ésta es la primera y breve entrada...
El día de hoy fui al Parque Morelos, me encanta salir, me encanta ver hombres. 
Debo aceptarlo, pero bueno, el punto es que después de dejar el lugar me dirigí a otro punto de la ciudad. En una plaza reconocida, hay ciertos baños de hombres, dónde hasta hace unos meses no sabía que se puede dar el cruising. 
El chiste es que dentro de dichos baños, llegué como si fuera a hacer mis necesidades, limpié la tasa con papel (nunca está demás un poco de limpieza) tomé asiento para hacer lo propio, pero en el cubículo hay un espacio en la puerta en el que se puede ver desde dentro hacia afuera y viceversa. Pude notar que un tipo me estaba viendo, así que me la empecé a jalar. Lamió ligeramente sus labios a y pude ver que se le antojó. A saber de ustedes no tengo el pene más grande de todos, pero es mió y trato de hacer lo mejor con él. 


Volviendo al tema: el sujeto se tuvo que ir, al parecer llevaba prisa. Yo salí del cubículo para lavarme las manos. Pero a los segundos llegó otro sujeto. Este iba a decidido a buscar diversión. Me paré en un mingitorio y me empecé a masturbar. El chico se paró a mi lado y noté que quería tocarla. Se lo permití y a los segundos lo hinqué para que me diera un oral. Lo hizo de manera genial.

Puedo agregar que el sentimiento de ser descubierto, sumándole la adrenalina generada se unen para experimentar una sensación genial e inolvidable.

Les ha pasado? Dónde?

-N



Saludos desde un lugar muy rosa

Bueno gente, hace mucho un amigo me dijo que tengo mucho que contar. Que debería escribir un libro. Sinceramente no creo estar capacitado para escribirlo. Sin embargo, sí tengo mucho que contar. 
Por eso escribo las siguientes líneas a manera de introducción.
Las historias que aquí serán lo más acercadas a la realidad posible. Puesto que algunas sucedieron hace mucho, no recuerdo todos los detalles. Algunas incluyen palabras que no muchos entenderán, pero bueno a googlearlas o pregunten su significado. Incluiré uno que otro sarcasmo y una que otra grosería y acompañados de imágenes para ejemplificar todo. Obviamente los nombres han sido alterados para no comprometer a terceras personas. La responsabilidad de lo escrito es mía y sólo mía. Les recuerdo que el fin de los escritos son con intenciones de divertir y si se puede, dejar un poco de sabiduría a través de mis vivencias. Si en algún momento ofendo a alguien, de antemano disculpas.
Bueno, comencemos. La cosa es aprender juntos.
Por cierto, se aceptan sugerencias en cuanto a los temas tratado, ortografía y demás. Por favor no intenten nada de lo que leerán, se na
nrran historias que implican actividad sexual de alto riesgo.

-N